¿Qué es una erosión dental?

La erosión dental es un tipo de desgaste que afecta al esmalte del diente (capa más externa y dura) y que se produce como consecuencia de la acción de diferentes agentes químicos. Son ácidos que van a provocar una alteración del pH de la saliva, desprotegiendo la estructura dental y dando lugar a un debilitamiento de la misma.

Existen otro tipo de desgastes como la abrasión dental o la atricción, sin embargo, estos son producidos por la acción mecánica bien de agentes externos como el cepillo dental, pastas de dientes muy abrasivas o por patologías como el bruxismo. Por ello es fundamental la realización de un buen diagnóstico, que determinará el tratamiento.

¿Cuáles son los agentes erosivos y dónde podemos encontrarlos?

EROSIONES ENDÓGENAS: Son aquellas causadas por ácidos que proceden de nuestro sistema digestivo. Generalmente en este caso, suele deberse a patologías como el reflujo gastroesofágico o a desórdenes alimentarios como la bulimia. Esta última enfermedad cursa con vómitos repetitivos que provocan la retención de los jugos gástricos en la boca los cuales, deterioran el esmalte dental. En estos pacientes podemos observar lesiones características en la cara interna de los dientes.

EROSIONES EXÓGENAS, causadas por ácidos que generalmente se encuentran en las comidas y en las bebidas. Este tipo son mucho más frecuentes.

Aquí tienes unos cuántos ejemplos: refrescos de cola, bebidas isotónicas, zumos de naranja y limón, frutas cítricas, vinagre, infusiones de frutas

El consumo excesivo de este tipo de alimentos disminuye el pH de la saliva, aumentando los procesos de desmineralización de la superficie dental. La saliva es la encargada de mitigar naturalmente el efecto erosivo de los ácidos sobre el esmalte dental, por lo que, cuantas más veces expongamos nuestros dientes a los ácidos, menos tiempo tendrá nuestra saliva para revertir el desgaste.

¿Cuáles son los síntomas de erosión dental?

El esmalte dental es la parte que recubre la parte externa de los dientes, cuya función es proteger la estructura interna del diente de los agentes patógenos externos, por ello, el debilitamiento del esmalte a causa de la erosión dental supone la exposición de la dentina (la parte de color amarillento del diente).

Algunos de los síntomas de la erosión dental son los siguientes:

Decoloración de los dientes: si se va dañando el esmalte debido a la erosión dental, el blanco natural de los dientes se va perdiendo, dando paso a un tono más amarillento.

Sensibilidad dental: al quedar expuesta la dentina con la erosión dental, los dientes quedan mucho más sensibles ante los agentes externos. Por este motivo, es habitual sentir un dolor agudo tras la ingesta de ciertos alimentos, comidas azucaradas o bebidas, especialmente frías o calientes.

Desgaste de las piezas dentales: los dientes pueden llegar a cambiar de forma, verse más redondeados o aparecer pequeñas fisuras. También pueden aparecer ciertas transparencias en los bordes dentales, perdiendo estos su opacidad.

Protocolo de prevención de la erosión dental

Evitar y reducir el contacto directo con ácidos
a. Reducir la ingesta de comidas y bebidas ácidas y carbonatadas y en el caso de beber de vez en cuando, aconsejar el uso de pajitas para evitar el contacto directo con los dientes.

Evitar alimentos, como el limón, kiwi, vinagre… que puedan producir un aumento de reflujo gastroesofágico en pacientes con patología y recomendar al paciente con este tipo de problemas (si no está en tratamiento) visitarse con su médico para llevar a cabo un control de la acidez.

Aumentar la resistencia a los ácidos a través de una terapia fluorada: se ha demostrado que se pueden minimizar los efectos erosivos de los ácidos con aplicación de flúor tanto en barniz como con aplicación tópica.

Recomendar un tratamiento de higiene oral diaria con pastas y colutorios fluorados y que contengan nanopartículas de hidroxiapatita a concentración específica, ya que han demostrado ayudar a la prevención de la erosión dental.

Uso de calcio y fosfato para aumentar la resistencia de los ácidos: el calcio y el fosfato reducen significativamente el potencial erosivo de varios agentes ácidos.

Cuidado con el cepillado: Las personas que padecen de erosión dental y que usan pastas dentífricas abrasivas, pueden agravar significativamente la pérdida de esmalte. Por ello, siempre recomendaremos a estos pacientes pastas no abrasivas y antes del cepillado, tras la ingesta de comida o bebida ácida, hacer enjuagues con agua para recuperar el pH de la cavidad oral y la espera de mínimo 30 minutos para proceder al cepillado y dejar que la saliva neutralice el pH ácido. Además, los productos anticaries, ayudan a prevenir la erosión.

Tratamiento para la erosión dental:

Se recomienda que el tratamiento de la erosión empiece por el protocolo de prevención expuesto anteriormente. Después de imponer al paciente y controlar el protocolo preventivo y según la cantidad de erosión que hayan sufrido los dientes se pasará al tratamiento restaurador:

Erosión inicial: si la pérdida de esmalte no es total, simplemente controlaremos al paciente a través del protocolo de prevención.
Erosión moderada: cuando hayamos perdido en una sola zona del diente prácticamente todo el esmalte y empiece a verse dentina, habrá que realizar un empaste con composite.
Erosión severa: cuando el paciente presente exposición dentinaria en varias zonas del diente o en varias piezas y presente sensibilidad habrá que realizar reconstrucciones y en algunos casos puede incluso ser necesaria la endodoncia y colocación de incrustaciones o coronas.