Dolor de mandibula: Causas y tratamientos

Un dolor en la mandíbula puede deberse a otras muchas causas, desde una fractura ósea a una infección en una muela (lo que popularmente conocemos como “flemón”), pero en esos casos el dolor es síntoma de una patología distinta y fácilmente identificable; no el problema (el dolor crónico) en sí mismo.

Cuando no existe ninguno de estos problemas, el dolor en la mandíbula suele ser síntoma de una patología en la articulación temporomandibular. La articulación temporomandibular (con frecuencia abreviada como ATM) es la articulación que, a modo de doble bisagra a ambos lados de la cara, conecta la mandíbula con el cráneo y permite que movamos la boca de arriba a abajo y hacia los lados cuando masticamos o hablamos.

Cuando esta articulación no funciona correctamente, además de en la articulación propiamente dicha, el paciente experimenta dolores de cabeza, en el cuello y la espalda. Por eso, en ocasiones, las patologías de la ATM se confunden problemas crónicos de migrañas o de dolor en las cervicales.

¿Cuáles son las causas del dolor de mandíbula?

Son diversos los factores que influyen en la aparición del dolor de mandíbula, como:

Estrés

El estrés es de las causas más comunes y habituales, ya que solemos tensionar o apretar la mandíbula excesivamente y a diario.

Bruxismo

El mal hábito de rechinar los dientes, sobre todo durante las noches, genera una tensión inusual y perjudicial que acaba ocasionando molestias en la mandíbula.

El bruxismo no solo origina continuas molestias para el paciente (dolor de mandíbula, cuello y cabeza), sino que además ocasiona un grave desgaste en el esmalte dental, siendo necesaria una reconstrucción con fundas dentales o carillas.

Problemas Esqueléticos

El dolor de mandíbula también puede tener su causa en problemas esqueléticos de mordida. Estos son, por ejemplo, el prognatismo, el retrognatismo o la asimetría mandibular, que dificultan que el paciente pueda cerrar la boca.

Estas patologías pueden solucionarse con intervenciones que combinan la cirugía maxilofacial con un tratamiento de ortodoncia.

Fuerte sontusión

Un traumatismo provocado por un golpe muy fuerte puede ocasionar problemas en el correcto movimiento de la articulación.

Situaciones postoperatorias

Otro aspecto que puede causar dolor transitorio en la mandíbula es el haberse sometido a una cirugía donde se haya mantenido la boca abierta durante mucho tiempo.

Tratamientos para el dolos de mandíbula

Cuando el dolor de mandíbula no tiene su origen en un problema maxilofacial como los que acabamos de mencionar, existen diversas maneras de tratar el dolor en la mandíbula en función de las particularidades de cada paciente y de la causa de su dolor:

Analgésicos e antiflamatorios

Los antiinflamatorios son útiles en la mayoría de los dolores mandibulares, aportando resultados positivos ante cuadros inflamatorios leves o moderados. Su acción clínica sobre el dolor se basa en el tratamiento de la molestia musculoesquelética.

Producen un alivio sintomático importante, además, si sientes mucho dolor y molestia, el médico podrá recomendarte un analgésico o algún tipo de antidepresivo para tratar el dolor crónico.

Férulas de descarga

Si existe una patología de la ATM lo más común es que el odontólogo proceda a prescribir una férula de descarga, ya que su función es precisamente evitar que la persona coloque los músculos bajo un estado de tensión.

Para que las férulas sean efectivas, el paciente tiene que asegurarse de utilizarlas regularmente y realizar el seguimiento indicado por el odontólogo.

Masajes fisioterapéuticos

Un fisioterapeuta puede tratar la zona afectada mediante la realización de masajes que sirvan para relajar los músculos y los tendones afectados.

Terapias Psicológicas

Las terapias psicológicas son de gran ayuda para tratar los problemas derivados del estrés, que tienden a agravar el dolor de mandíbula.

Consejos para aliviar el dolor de mandíbula

Medicamentos

Estos medicamentos pueden ayudar a aliviar el dolor asociado con los trastornos de ATM, pero deber ser recetados o indicados por el especialista:

Analgésicos y antiinflamatorios. Si los analgésicos y/o antiinflamatorios de venta sin receta no son suficientes para aliviar el dolor de ATM. Tu odontólogo o médico te puede recetar analgésicos de mayor dosis para aliviar el dolor
Antidepresivos tricíclicos. Estos medicamentos, se usan normalmente para la depresión, pero a dosis reducidas, en raras ocasiones se utilizan para aliviar el dolor y controlar el bruxismo.
Relajantes musculares. Estos tipos de medicamentos se utilizan de manera temporal para aliviar el dolor causado por los trastornos de ATM creados por espasmos musculares.

Estilo de vida y remedios caseros

El primer paso es tomar conciencia de los hábitos relacionados con la tensión muscular, como apretar la mandíbula y rechinar los dientes, morder o masticar lápices, ayudará a reducir la frecuencia de los mismos. Estos son alguno de los remedios caseros que puedes tomar para disminuir el dolor:

Reduce el uso excesivo de los músculos. Toma alimentos blandos. Corta los alimentos a trozos para evitar masticar en exceso. Evita la comida pegajosa o dura como caramelos o chicles.
Estiramientos y masajes. Algunos ejercicios de fisioterapia puede para estirar y fortalecer los músculos de la mandíbula y masajearte los músculos pueden reducir las molestias.
Técnicas de relajación. Respirar más despacio intencionalmente y realizar inhalaciones profundas y regulares puede ayudar a relajar la tensión muscular y así reducir el dolor.

Lo más importante es el diagnóstico que te pueda hacer tu odontólogo o cirujano maxilofacial. Una vez realizadas las pruebas diagnósticas necesarias, se procederá al tratamiento que más convenga. Algunos de los tratamientos más comunes son: férula de descarga, tratamiento de ortodoncia y tratamiento con bótox.

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Células madre en los dientes

Las dientes y muelas de la boca pueden afectarse por diferentes enfermedades, romperse y hasta perderse. Pero hoy, gracias a los avances en la investigación, es posible pensar en la regeneración dental con células madre como una alternativa cuando algo no marcha bien en la cavidad bucal.

Funciones tan importantes, como comer, hablar y sonreír, dependen de la participación de las piezas dentarias. Su integridad es necesaria para que estas actividades puedan realizarse sin inconvenientes.

Pero muchas veces, los dientes sufren daños por enfermedades orales como las caries, la enfermedad periodontal, el bruxismo y los traumatismos. La capacidad de reparación propia de los tejidos dentarios es muy escasa o casi nula.

Por todo esto, encontrar nuevas alternativas que permitan reparar las lesiones que sufren los dientes es una noticia prometedora. Los científicos están explorando la posibilidad de lograr la regeneración dental utilizando células madre.

¿Qué son las células madre?

En los últimos tiempos, las células madre y los tratamientos que las incluyen han ganado popularidad. Incluso existe polémica y debates éticos alrededor de los usos de este tipo de tecnología.

Las células madre se pueden considerar como el componente más primitivo de todo nuestro organismo. De ellas han surgido y se han especializado todas las demás células del cuerpo, con sus funciones específicas.

Las células madre tienen la particularidad de poder dividirse y multiplicarse con diferenciación por largos períodos de tiempo. Y al no ser especializadas, tienen el potencial de convertirse en cualquier tipo de célula del cuerpo.

En los laboratorios es posible aislar estas células madre. Allí, en ambientes controlados, se dividen y dan origen a nuevos elementos: las células hijas.

Las células hijas pueden tomar dos caminos:

Convertirse en nuevas células madres. Es lo que se conoce como autorrenovación.
• Diferenciarse en alguna célula especializada con una función específica. Células sanguíneas, cerebrales, del músculo cardíaco o del hueso, por ejemplo.

Los investigadores y los científicos que estudian esta técnica esperan comprender mejor la manera en que se desarrollan algunas enfermedades. También buscan generar células sanas que reemplacen a las enfermas; es lo que se conoce como medicina regenerativa. Consiste en orientar a las células madres a que se especialicen y se conviertan en el tejido dañado que se pretende reparar.

También son útiles a la hora de probar y experimentar con nuevos medicamentos. Utilizar los fármacos sobre este tipo de células permite probar la seguridad y la calidad de la medicación sobre tejidos específicos.

¿De dónde provienen las células madre?

Los científicos han descubierto varias fuentes de células madre. A continuación mencionamos algunos de sus posibles orígenes:

Células madre embrionarias: provienen de embriones con pocos días de vida. Se las considera pluripotentes, es decir, que pueden dividirse en más células madre o bien convertirse en cualquier tipo de célula del cuerpo. Son las que se utilizan para reparar o regenerar tejidos dañados.
Células madre adultas: se encuentran en pequeñas cantidades en la mayoría de los tejidos adultos. Tienen una capacidad más limitada para originar diferentes células del cuerpo.
Células adultas modificadas: son células madres adultas que se modifican en laboratorios para que tengan las mismas propiedades de las células madre embrionarias. A través de una reprogramación genética se pueden usar células propias, pero pluripotentes, siendo de utilidad para evitar el rechazo del sistema inmunitario.
Células madre perinatales: son células madre presentes en el líquido amniótico y en la sangre del cordón umbilical. Tienen la capacidad de especializarse en componentes de cualquier tejido del cuerpo.

En los últimos años se ha descubierto que las células madre de la pulpa dental, que es la porción más interna de los dientes, y las del ligamento periodontal, presentan las mismas características que las células mesenquimáticas de la médula ósea. Estos hallazgos han incrementado la investigación al respecto.

Pues les han otorgado importancia de índole médica. La facilidad de obtenerlas y la rapidez en la multiplicación podrían colocar a las células madre dentales como un campo a considerar para el tratamiento de patologías óseas, musculares y neurológicas, como la enfermedad de Parkinson.

Uso de las células madre dentales

La medicina de regeneración basada en células madre dentales, aunque no es concluyente, ha mostrado resultados prometedores en el uso de células madre dentales derivadas del diente de leche.

Los ensayos clínicos han consistido en extraer células madre de la pulpa de dientes de leche sanos, que posteriormente se han cultivado en el laboratorio antes de implantarse en el diente lesionado. Tras el correspondiente seguimiento, se ha descubierto que un año más tarde los dientes que habían recibido el tratamiento con células madre habían recuperado cierta sensación en el diente lesionado, mientras que el grupo de control no.

Estudios recientes demostraron que las células madres de origen dentario pueden diferenciarse y dar origen a varios tipos de tejidos. Y se multiplican a gran velocidad. Por este motivo, las piezas dentarias son una excelente fuente de este tipo de elementos.

Se han podido obtener células madre de origen dental de cinco sitios diferentes: de la pulpa, del ligamento periodontal, de dientes primarios exfoliados, de la papila dental y del folículo dentario.

El desarrollo de la regeneración dental a partir de células madre está en pleno proceso de investigación y nuevos hallazgos. Pero en la actualidad, su uso se centra en las áreas quirúrgicas y de endodoncia.

Alcances de la regeneración dental con células madres

La regeneración dental con células madre puede ser utilizada en varios niveles que aún se están estudiando. Estos son algunos de los posibles tejidos sobre los que se podría aplicar la técnica:

Tejido óseo: las células madre podrían diferenciarse para regenerar hueso del complejo cráneofacial. Esto cobra utilidad para tratar deficiencias óseas en los maxilares, intervenir en traumatismos maxilofaciales y abordar de una nueva manera las fisuras labio alveolo palatinas.
Dentina y pulpa: las células madre pueden diferenciarse en odontoblastos capaces de formar nueva dentina o reparar el tejido pulpar dañado. Conservar la vitalidad de los dientes es uno de los grandes cambios que plantea este tipo de terapéutica que revolucionaría la endodoncia.
Ligamento periodontal: las células madre aisladas del ligamento periodontal pueden diferenciarse en adipocitos, cementoblastos y células formadoras de colágeno. Además, se ha logrado la neoformación ósea en zonas afectadas por periodontitis al implantar células madre, siendo una terapéutica prometedora para el tratamiento de la piorrea.
Dientes: estudios experimentales buscan que células madre adultas con el adecuado estímulo puedan dar origen a un diente y al tejido óseo que lo rodea. A través de un sistema se dirige la trayectoria de las células en un molde tridimensional que se coloca en la propia cavidad bucal del paciente, donde surgiría el nuevo elemento dentario.

Lograr este tipo de tratamiento cambiaría de manera definitiva la rehabilitación oral. Pues con la simple colocación de un implante preparado debajo de la encía del paciente, sin perforar el hueso, se podría desarrollar una nueva pieza.

El nuevo elemento estaría incluido en el sistema oral con todos los componentes de sostén iguales a un diente propio. Con seguimientos radiográficos, ortodoncia y restauraciones convencionales se lograría la erupción y la estética adecuada para que la pieza creada se integre a la arcada sin inconvenientes.

El desafío de la regeneración dental con células madres

Las células madre dentales deslumbran un futuro prometedor a la hora de tratar lesiones y daños en la boca. Preservar la vitalidad de la pulpa dental, lograr la sujeción de los dientes a través de un periodonto sano y reemplazar las ausencias dentarias con nuevos dientes iguales a los originales comienza a ser una posibilidad no muy lejana.

Los nuevos avances en el campo de la regeneración dental utilizando células madre sugieren que los tratamientos odontológicos que conocemos en la actualidad sufrirán cambios notables. Las terapéuticas serán más seguras, menos invasivas y no producirán el rechazo del paciente. Pues las células que se utilicen serán las propias de la persona.

Aún queda mucho por investigar, probar y experimentar. Pero esta nueva odontología no es tan distante.

Hoy es necesario seguir estudiando y experimentando en los laboratorios, pero la reparación y la regeneración dental a partir de células madre está muy próxima. Estas hipótesis cada vez se acercan más a la realidad y podrán introducirse a la odontología habitual en no demasiado tiempo.

Gomez Bollain, clínica dental en Bilbao especialista en tratamientos como invisalign en Bilbao.

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Cómo matar el nervio de una muela

Seguro que alguna vez has escuchado la expresión “matar el nervio” de un diente o muela, pero ¿sabes realmente cómo se mata el nervio de una muela?. Se trata básicamente de una intervención de endodoncia realizada en un diente o en una muela en la que el nervio está afectado por alguna razón.

Normalmente el nervio de un diente suele verse afectado por una caries que haya llegado a tocar esa parte y por tanto esto produzca cierto dolor. A continuación te contamos qué es matar el nervio de una muela y cómo hacerlo.

¿Qué significa matar el nervio de una muela o un diente?

El procedimiento para matar el nervio de un diente es la endodoncia. Esta es una intervención común en odontología, la realiza un endodoncista.

El procedimiento de endodoncia consiste en eliminar las bacterias y el nervio o pulpa que está muriendo o muerto dentro de la raíz del diente, específicamente en el conducto radicular. Se realiza a fin de evitar que se propague el dolor dental, generalmente a causa de infección producto de caries. El objetivo es preservar el diente y no tener que sacarlo.

En la endodoncia, lo que se hace es retirar la pulpa del diente.

Otras alternativas mucho más extremas serían la extracción de la pieza dental y la posterior colocación de implantes dentales. Esto implica un gasto mayor y una serie de cuidados y previsiones extras en la higiene dental.

¿Por qué podría ser necesario matar al nervio de un diente?

“Quemar el nervio” de un diente o matarlo puede funcionar para aliviar el fuerte dolor y salvar el diente. Sin embargo, este procedimiento no se debe realizar en todos los casos.

Algunas de las situaciones comunes en las que es necesario aplicar el tratamiento para matar el nervio de la muela o diente, con la endodoncia son:

Caries.

Como bien sabemos las caries se propagan en el diente y pueden hacerse cada vez más profundas. Si la detectan a tiempo no habrá problema, pero si esto no sucede las bacterias llegan al nervio del diente. Ahí es cuando pueden causar un dolor insoportable, que se acentúa al comer.

El odontólogo te hablará de toda esta situación en consulta y es probable que te diga que debe matar el nervio de un diente causante del dolor.

Hipersensibilidad dental.

En ocasiones por diferentes afecciones como caries o gingivitis se puede sufrir de hipersensibilidad dental. Esta puede agravarse al masticar y allí es cuando hay que hacer este procedimiento.

La idea es eliminar todo rastro del problema y sellar para evitar que vuelva a repetirse esta desagradable experiencia.

Coronas y puentes.

Puede ser necesario matar un nervio dental cuando se coloca algún tipo de implante o prótesis. Para ello, se requiere tallar a fondo el diente y el odontólogo puede recurrir a este procedimiento. 

Fracturas dentales.

En ocasiones alguna lesión o golpe fuerte en nuestros dientes puede ocasionar una ruptura, a tal punto que queda el nervio expuesto. Una situación de tal magnitud genera mucho dolor y el dentista debe evaluar si es necesario aplicar una endodoncia.

¿Cómo se realiza el procedimiento de matar el nervio de una muela?.

La endodoncia es solo para pacientes que sufren una infección pulpar muy avanzada, se emplea solo en casos donde este tejido ya no puede recuperase.

Es probable que el odontólogo primero haga una revisión de rutina y solicite unas radiografías. Luego hará un diagnóstico y así determinará si es necesario hacer la endodoncia para mater el nervio del diente.

La endodoncia se realiza siguiendo una serie de pasos que resumimos a continuación:

  • En primer lugar, se te inyectará anestesia para adormecer la zona de la boca. El endodoncista perforará la pieza dental para exponer su pulpa, que es el tejido blando del centro del diente.
  • Se realiza una limpieza para eliminar las bacterias y la pulpa en el área y sus alrededores. Así se previenen futuras infecciones.
  • Se elimina cualquier rastro de caries profundas o infecciones para luego proceder a extraer el tejido blando o la pulpa dañada de la pieza dental (esto es lo que se conoce popularmente como el nervio). La eliminación de la pulpa infectada se hace con pequeñas limas, se limpian los canales dentro de la raíz.
  • Luego se rellena el espacio generado en el diente con algún material biocompatible temporalmente. La finalidad de esto es que la pieza no pierda su integridad y funcionalidad.
  • Por último, en una o dos semanas deberás ir a tu dentista regular, no al endodoncista. Quien te pondrá un relleno permanente, una incrustación o una corona para sellar bien el diente, cuidando que no quede algún agujero para evitar la acumulación de bacterias.
  • Es importante mencionar que para llevar a cabo el tratamiento se utiliza anestesia local. Y que es posible que sientas algunas molestias en los primeros días posteriores a la intervención, para lo que el especialista te recetará analgésicos y antibióticos.

¿Es doloroso matar el nervio de una muela?.

En la actualidad, con todas las técnicas de sedación y anestesia local que existen, es posible realizar la endodoncia sin que el paciente sienta dolor.

Por otro lado, es importante tomar en consideración que, en el momento de matar el nervio de la pieza dental afectada, se estará eliminando el receptor de sensibilidad nervioso, de tal manera que luego de la intervención y el efecto de la anestesia, tampoco se debería sufrir dolor.

De igual manera, el odontólogo, dependiendo del caso, podrá recetar antiinflamatorios o antibióticos, en caso de existir riesgos de infección o si la zona ya estuviese previamente infectada.

Beneficios de matar el nervio de una muela.

Cuando se practica la endodoncia en una muela o cualquier la pieza dental, esta puede recuperarse y volver a ser funcional. Por lo que, uno de los principales beneficios de matar el nervio de una muela es que salvas el diente. Además, eliminan cualquier molestia o dolor de la zona.

Otra de las ventajas de matar al nervio de una muela inflamado o deteriorado es que evitarás infecciones y la propagación de bacterias. Esto no solo es beneficioso para donde esté el daño, sino también en el resto de los dientes.

Tendrás una mejor mordida y una masticación más natural.

Riesgos y complicaciones de matar el nervio de una muela.

Las complicaciones y riesgos comunes de la endodoncia son:

  • Dolor temporal debido a la inflamación de los tejidos que rodean el diente.
  • Un diente más oscuro, aunque hay procedimientos que pueden aclararlos.
  • Fractura del diente, porque tiene menos fuerza y resistencia.

Injerto de encías, ¿qué es?

La retracción de encías es cada vez un problema más frecuente en los pacientes. Pero no todo está perdido, ya que se puede recuperar encía mediante un injerto de encía.

Este suceso supone una afectación en la estética dental, un aumento de la sensibilidad dental y un peor pronóstico tanto en dientes como en implantes dentales a largo plazo.

Os explicamos en qué consiste el injerto de encía, cómo se hace, cuáles son los beneficios, las posibles complicaciones y los cuidados que debes tener en cuenta tras un injerto de encía.

¿Por qué se retraen las encías?

La encía sirve de soporte para los dientes e implantes y protegen a éstos frente a agresiones mecánicas (como el cepillado o la masticación) y los ácidos de la boca. Es la encargada de rellenar los espacios interdentales (entre dientes) y evitar en muchas ocasiones el empaquetamiento de comida.

Las encías retraídas pueden ocurrir por varios factores:

  • Presencia activa o no de la enfermedad periodontal, comenzando desde una gingivitis o sangrado de encías. Estas enfermedades iniciales pueden desencadenar una periodontitis o piorrea que afecta al hueso que rodea los dientes.
  • Técnica incorrecta de cepillado o cepillo dental demasiado duro: Existen pacientes que se cepillan con demasiada fuerza o de manera inadecuada, así como el uso de cepillos de cerdas demasiado duras. Se recomienda un cepillo de dureza media, así como una limpieza con la técnica de Bass modificada para realizar el cepillado de manera correcta.
  • Hábitos nocivos: como usar palillos o piercing en labios – lengua.
  • Aparición después de un tratamiento de ortodoncia: Si no se controla durante el tratamiento la posición de los dientes dentro de la arcada dental, pueden aparecer recesiones después del tratamiento de ortodoncia.
  • Tras un traumatismo o golpe en la boca: esto puede hacer que el diente se desplace hacia el exterior, generando una retracción de encía.
  • Bruxismo: Este proceso genera que los dientes (generalmente premolares o molares) pierdan el esmalte del cuello del diente por micromovimientos, generando “cuñas” en los dientes, que acaban desencadenando en recesiones o retracciones de la encía.
  • Susceptibilidad del paciente: existen diferentes biotipos de encía, siendo unos muy finos y mas susceptibles de sufrir retracción de encías.

Estos factores predisponen al paciente a sufrir encías retraídas, pero puede que el paciente no se dé cuenta hasta que exista excesiva pérdida de encías. En estos casos y según la gravedad, está indicado el injerto de encía.

¿Qué es un injerto de encía?

El injerto de encía es una técnica de cirugía plástica periodontal que consiste en extraer tejido de una zona donante de la boca (del paladar o la zona de la muela del juicio superior, por ejemplo), para cubrir la zona del diente o implante que ha quedado expuesta.

Zonas que se pueden usar para el injerto

Las zonas donantes más comunes son el paladar duro, desde los caninos a los terceros molares, y la tuberosidad, que es la parte distal de los últimos molares superiores.

La elección de una u otra zona dependerá de la cantidad de encía necesaria y de sus características de grosor.

Tipos de injerto de encía

En función del grado de severidad de la recesión y del estado de las encías del paciente, podemos distinguir diferentes tipos de injerto.

• Injerto de encía libre: Se coge un pequeño trozo superficial (incluyendo epitelio) de alguna de las zonas ya mencionadas. Tras el injerto, la zona irá cicatrizando poco a poco y cubriendo la lesión, quedando un nuevo tejido del aspecto de la zona donante… La zona tratada tarda en cicatrizar unas 6 semanas, aunque el remodelado de la encía (pequeños cambios que pueden ir ocurriendo en la encía a medida que esta va cicatrizando) puede seguir produciéndose hasta 12 meses después.
• Injerto de tejido conectivo: En este caso, en lugar de obtener la parte más superficial del epitelio de la encía, se obtiene el tejido conectivo de una parte más profunda. Este injerto puede después colocarse en la zona de la recesión de diversas formas, como tunelizado, en combinación con colgajos de encía desplazados. Aquí el aspecto del injerto será exactamente igual al de las zonas de alrededor.
• Injerto de materiales artificiales: Existen diversos tipos de materiales, tanto procedentes de animales como de cadáveres. Estos tejidos están procesados de forma especial para poder usarse como materiales de injerto. El procedimiento es similar al que se realiza con un injerto obtenido del propio paciente, combinado con diversas técnicas de cirugía plástica periodontal.

Sea cual sea el tipo de injerto seleccionado, el objetivo es doble: cubrir la recesión y lograr un grosor de encía suficiente para evitar que esta recesión vuelva a aparecer.

Beneficios del injerto en dientes o implantes dentales:

• Recupera total o parcialmente la encía perdida (según el caso)
• Aumenta su grosor y mejora el pronóstico.
• Protege a los dientes o implantes durante más tiempo, haciendo que éstos duren muchos más años y sean menos susceptibles de perderse.
• Eliminan el frenillo dental porque se gana encía queratinizada, en vez de mucosa.
• Reduce la sensibilidad dental al cubrir la raíz expuesta
• Mejora tu estética dental, al no verse dientes largos.

¿Duele el injerto de encía?

La cirugía plástica periodontal en sí misma no es dolorosa, pues el dentista aplica al paciente anestesia local que mitiga cualquier molestia durante el tratamiento.

Por lo tanto, podemos afirmar que el injerto de encía, como tal, no duele.

Para facilitar todo lo posible la consulta de la persona durante la operación, ponemos a su disposición la posibilidad de elegir el sistema de sedación consciente.

Esta técnica, indicada para personas que sufren de miedo al dentista, alivia el estrés y la ansiedad del paciente mientras se esté llevando a cabo el injerto de encía.

La duración de la cirugía es de 60 minutos aproximadamente, ya se realice mediante la técnica del colgajo de reposición coronal o tomando tejido palatino.

Tras realizar la cirugía, será necesario poner puntos de sutura, que se retirarán al cabo de 1 o 2 semanas, depende de cada caso.

Cuidados Postoperatorios de los injertos de encía

Estos cuidados son comunes a cualquier procedimiento dental que implique sangrado.

• No se debe enjuagar la zona en el mismo día de la cirugía.
• Se debe comer alimentos blandos y fríos en el mismo día de la cirugía
• Si existiera sangrado después de la cirugía, se debe colocar una gasa seca, y comprimir la zona mordiendo o apretando con el dedo.
• Al día siguiente, debe realizarse enjuagues con agua con sal 2 veces al día durante una semana. Estos enjuagues no deben ser efusivos, sino simplemente dejar actuar sobre la zona de la herida.
• Pueden alternarse con enjuagues con clorhexidina.
• Evitar cepillarse la zona, pues podría abrir los puntos.
• No tirarse del labio para mirarse el injerto, pues podría hacer que éste se desprendiera.
• Tomarse la medicación según indicaciones del cirujano.
• Es normal el cambio de color del propio injerto, pasando de un color blanquecino, a uno amarillento, y posteriormente color rosáceo.
• Pueden aparecer hematomas en la zona o en el cuello, así como inflamación y tumefacción de la zona.

Complicaciones tras la cirugía de injerto de encía

Una de las mayores posibles complicaciones que pueden existir es el sangrado postoperatorio después de la cirugía de injerto de encía.

Cuando esto ocurre, este sangrado se debe considerar “normal” o excesivo.

El sangrado normal ocurre cuando pasado el efecto del anestésico, la zona donante o receptora sangra en mayor cantidad que anteriormente. Este tipo de sangrado suele contenerse con una gasa seca y presión o masticación sobre la zona.

El sangrado excesivo, ocurre cuando al realizar la maniobra anterior, éste no cede. Este hecho puede ser debido a que existen capilares de la zona que se han quedado expuestos. De igual manera, se debe de comprimir la zona con una gasa humectada en Amchafibrin o cualquier agente hemostático, o incluso colocar una esponja de fibrina. En algunos casos es necesario administrar algún punto de sutura. Este tipo de sangrado no suele ocurrir, porque debe controlarse al paciente inmediatamente de la realización del injerto y que salga de la clínica dental sin sangrado abundante.

Otra de la posibles complicaciones es la necrosis o movilidad del injerto de encía.

Esto puede ocurrir por varios motivos, por la realización de una técnica incorrecta de sutura por parte del cirujano, que evite la movilización del injerto o porque el paciente ha realizado algún movimiento de la zona que puede originar que los puntos se suelten. De igual manera, siempre se produce una necrosis y contracción parcial del injerto de un 15-20%. que suele afectar a los bordes de la herida.

Otra posibilidad es que no se recubra completamente la zona, teniendo que realizar otra intervención quirúrgica para realizar otro segundo injerto de encía. Este tema debe de abordarse con anterioridad, porque no todos los casos pueden conseguirse a la primera, y debe de consensuarse con el paciente.

La clínica Gomez Bollain es una clínica dental especialista en ortodoncia. Tanto si tienes problemas con tu injerto como si estás interesado en invisalign en Bilbao, llámanos y te asesoraremos.

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El surco nasogeniano

Para las personas que se encuentran pendientes de verse cada día mejor suavizando los estragos que se producen en la piel por el paso de los años, es motivo de preocupación el surgimiento del surco nasogeniano, conocido también como pliegue nasogeniano o línea de risa. Esto no debe causar inquietud, ya que en la actualidad existen múltiples tratamientos en el ámbito estético de la mano de médicos especializados en la cirugía plástica y la medicina estética que pueden solucionar esta situación.

A continuación te explicaremos un poco más las causas, como tratarlo y de qué manera prevenir su aparición.

¿Qué es el surco nasogeniano?

El surco nasogeniano es el límite natural entre la mejilla por un lado y la nariz y boca por otro. Hay una fusión anatómica y se debe a que en la mejilla se encuentra la grasa facial mientras que no hay grasa en nariz y labios.

Los surcos nasogenianos son unos de los primeros cambios que observamos en nuestro rostro, son surcos que se forman generalmente con el paso del tiempo y aparecen como una arruga profunda que va desde la base de la nariz a la comisura de la boca.

Esta línea muchas veces se continúa con el surco mentogeniano, conocido como arrugas de marioneta.

¿Por qué aparece el surco nasogeniano?

La aparición de estos surcos en el rostro es progresiva, y es debida por un lado al hundimiento de la propia zona del surco, que se produce cuando gesticulamos, sobre todo al reír, y por otro lado al propio envejecimiento del rostro. Con el paso del tiempo los tejidos faciales tienden a “caer”, pero este descenso de tejidos se produce en la cara desde las zonas más laterales hacia las zonas centrales, y hacia abajo. Esto es así por los ligamentos de retención faciales, que son estructuras fijas del rostro. Esta caída de tejidos determinará que marquemos más o menos el surco nasogeniano.

Las causas que dan origen a la aparición de los surcos nasogenianos son:

Factores genéticos: El desarrollo de las arrugas faciales puede acelerarse por una predisposición familiar, un ejemplo de esto sería si la producción de colágeno se ve inhibida por trastornos metabólicos.
Envejecimiento: En la medida que se aumenta la edad y se envejecen los pómulos pueden aplanarse y la gravedad puede hacer que descienda la piel que se encuentra suelta en el área, esto también puede suceder por la disminución tanto del colágeno como de la elastina (ambas son sustancias naturales que le dan elasticidad a la piel, resiliencia y la capacidad de mantener su forma original).
Daño solar: los rayos solares descomponen el colágeno y la elastina, por ello, la exposición
frecuente sin protección solar afecta a ambas sustancias presentes en las áreas expuestas a los rayos del sol, causando arrugas además de cambios en la textura de la piel del rostro.
Pérdida o aumento de peso: cuando se pierde mucho peso, es posible que aparezca piel extra y floja. En caso de que se aumente de peso, es posible que se tengan mejillas más grandes. Tanto la disminución como el incremento de peso pueden acentuar los pliegues nasogenianos.
Disminución del colágeno: a medida que se avanza en edad, el colágeno de la piel disminuye. Esto hace que la piel alrededor de la boca y los ojos se vea más delgada, así como débil.
Pérdida de grasa: en la medida que se envejece, se puede perder grasa de las mejillas, con esta pérdida, algunas partes de la cara pueden parecer flácidas.
Fumar: este hábito destruye el colágeno, al igual que la elastina de la piel.
Estrés y consumo excesivo de alcohol: ambas situaciones favorecen el desarrollo de los surcos nasogenianos además de todo tipo de líneas o arrugas. Esto se debe a los radicales libres liberados, así como al estrés oxidativo causado por beber alcohol en exceso, acelerando el envejecimiento de la piel.

¿A qué edad aparece el surco nasogeniano?

No existe una edad concreta para que empiece a salir el surco nasogeniano. Sin embargo, a partir de
los 20 años, la piel comienza a perder humedad lentamente; dependiendo del estilo de vida que se lleve, esto puede hacer que los surcos nasogenianos se comiencen a visualizar de forma temprana pero son muy finos.

Es a partir de los 40 años cuando se puede esperar que estos se hagan más marcados y por consiguiente más visibles, se piensa que actividades musculares acumuladas como comer, beber o reírse pueden contribuir con su aparición más temprana.

¿Cómo puedes darte cuenta de que tienes marcado el surco nasogeniano?

Las líneas de expresión aparecen como forma de pliegues en la piel. En el caso del surco nasogeniano, este va desde ambos lados de la nariz hasta las comisuras de la boca. Cuando se es joven, estos pliegues solo se evidencian cuando se sonríe o se ríe y luego desaparecen cuando el rostro se relaja.

Con el paso del tiempo, se pueden convertir en arrugas profundas pero también permanentes aunque no se esté riendo, esto indica que estás ante la presencia de un surco nasogeniano marcado.

¿Pueden las cremas prevenir su aparición?

La aparición de surcos nasogenianos es una de las primeras razones por las que acudimos a un profesional de la medicina estética, ya que, tras experimentar con multitud de cremas, nos damos cuenta de que el problema no se soluciona.

Los cosméticos que utilizamos de forma habitual tienen muy poco efecto en tejidos más allá de la piel, por lo que es complicado que puedan ayudarnos a resolver problemas de estructuras faciales que tienen implicaciones más profundas.

¿Cómo se puede disminuir el surco nasogeniano desde el punto de vista estético?

Los surcos nasogenianos son un problema estético pero no representan una condición de riesgo para ninguna condición de salud y no necesariamente requieren de tratamiento. Para algunas personas, la presencia de los surcos nasogenianos pueden resultar muy pronunciados, motivo por el que pensarían en eliminarlos, sin embargo, para otras solo bastará con realizarles algunos procedimientos estéticos para mejorarlos.

Existen diferentes procedimientos estéticos para aplicar en los surcos nasogenianos, a pesar de que estos son una característica facial normal que no requiere de tratamiento.

Rellenos: los rellenos dérmicos son implantes que se colocan justo debajo de la piel, estos
son utilizados para rellenarla además de reducir la aparición de arrugas. Es una inyección
de una sustancia que cubre el área, restaurando el volumen y la plenitud. Los rellenos más usados van desde el ácido hialurónico, el ácido poliláctico, hidroxiapatita de calcio hasta microesferas de polimetilmetacrilato.

Este procedimiento es aplicado por un médico debajo de la piel en el área del pliegue nasolabial o en la parte superior de la mejilla. Este procedimiento se realizará de forma ambulatoria en el consultorio. Esta aplicación capaz de hacer que los surcos nasogenianos sean menos pronunciados, no permite desaparecer al mismo tiempo se pueden usar para ayudar a que la piel cercana se vea más llena y más joven. También se puede inyectar grasa para disminuir la apariencia del surco nasogeniano, esta grasa es extraída de otra zona del cuerpo y se aplica en la zona a rellenar.

Aplicación de retinoides: la colocación de esta forma química de vitamina C en la piel puede estimular la producción de colágeno, reduciendo las líneas de expresión con el tiempo.
Inyecciones de toxina botulínica: el bótox, nombre comercial de la toxina botulínica, es una inyección utilizada para disminuir las líneas de expresión entre los ojos, también se puede usar para debilitar y relajar el músculo específico que contribuye a la formación del surco nasogeniano. Las inyecciones de bótox pueden reducir la apariencia de los surcos nasogenianos por algunos meses.
Estiramiento de la piel: los tratamientos con láser, ultrasonido u ondas de radio pueden ayudar a estimular la producción de colágeno y tensar la piel suelta.
Cirugía: las cirugías estéticas resultan ser muy costosas, además tiene un largo tiempo de recuperación y conllevan a riesgos o complicaciones. Es importante tener claro que no existe una solución permanente para los surcos nasogenianos. Esta solo puede cambiar la posición, remodelar la piel y los tejidos que los rodean; las opciones para reducir los surcos nasogenianos son el estiramiento de las mejillas al igual que un estiramiento facial.

¿En cuanto tiempo se ven los resultados?

Los resultados posteriores a la aplicación del relleno con ácido hialurónico así como de los rellenos dérmicos y demás procedimientos para reducir los surcos nasogenianos son inmediatos. En las 2 semanas después de la aplicación, se ven los resultados del tratamiento. Esto se debe a que los pliegues de la zona de la cara recuperan el volumen de forma rápida e inclusive segura.

Los efectos de esta aplicación de rellenos de surco nasogeniano duran alrededor de l0 a 12 meses, por esta razón se recomienda la aplicación por lo menos una vez al año para rellenar los surcos nasogenianos y mantener la piel hidratada.

¿La aplicación de algunos de los tratamientos tiene efectos secundarios?

Los tratamientos estéticos aplicados para eliminar los surcos nasogenianos son seguros y no producen casi ningún efecto secundario. En ocasiones, dependiendo de la piel de cada persona puede producirse una pequeña inflamación al momento de aplicar algunas sustancias como el ácido hialurónico, esta desaparece por sí sola luego de unas horas de la aplicación del tratamiento. La combinación de tratamientos estéticos puede brindar armonía en el rostro gracias a la combinación de diferentes técnicas.

¿Qué cantidad de relleno necesito?

Como sabéis, los rellenos dérmicos como el ácido hialurónico, vienen precargado en jeringas habitualmente de 1 ml.

En surcos suaves puede ser suficiente con 1 ml en la zona del surco, pero en otros más profundos podemos necesitar hasta 3 ml de producto.

No olvidéis que si tratamos la zona del pómulo para un tratamiento más completo precisaremos también 1 o 2 ml más para esa zona.

Sin embargo, dejaros aconsejar por vuestro médico, el cual sabrá la cantidad correcta de producto para que tengáis un buen resultado. Siempre es mejor ser prudente y empezar con poco producto, para obtener un resultado natural, a tiempo de más , siempre estamos.

¿Cuánto me dura el resultado del tratamiento?

La duración del resultado está sobre todo ligada al tipo de hialurónico que utilice vuestro doctor, y puede oscilar entre los 6 meses y el año y medio. Preguntad siempre, ya que a veces, hialurónicos más económicos tiene duraciones más cortas.

Hay otros factores que pueden influir en la diferente duración de un mismo ácido hialurónico. Gente con metabolismo muy activo, grandes deportistas o fumadores, pueden tener duraciones algo menores del producto.

¿Me va a doler el tratamiento?

Los tratamientos faciales que realizamos con ácido hialurónico son muy bien tolerados, ya que en la mayoría de los casos aplicamos una crema anestésica previamente, lo que disminuye mucho la molestia del pinchacito.

¿Puedo hacer vida normal después del tratamiento?

Se puede hacer vida absolutamente normal, únicamente limitamos el deporte intenso durante 48 h y evitaremos saunas y piscinas durante el mismo periodo de tiempo. Se pueden utilizar cosméticos y maquillaje al día siguiente del tratamiento.

¿Cuándo veré el resultado del tratamiento?

El resultado se observa inmediatamente, tras la inyección del producto, sin embargo, tras unos 15 días, el resultado es más bonito ya que habrá desparecido la pequeña inflamación que produce la inyección y el producto queda mejor integrado en nuestra anatomía.

Reapertura de nuestra clínica

Dentaduras postizas

Las dentaduras postizas o también conocidas como prótesis dentales, no son más que piezas dentales artificiales que buscan reemplazar los dientes que faltan. Podemos optar por dentaduras removibles, que reemplazan la totalidad de los dientes del maxilar superior o el inferior, o incluso ambos. Este tipo de dentadura recibe el nombre de dentadura postiza completa. Estas se apoyan completamente por encima de las encías. Por otro lado, están aquellas que solo buscan reemplazar algunas piezas dentales y reciben el nombre de dentadura postiza parcial o puente.

También tenemos que destacar la existencia de otros tipos de prótesis dentales, denominados implantes dentales. Estos se van a adherir a piezas de metal que se colocan debajo de las encías, directamente incrustados en los huesos del maxilar. La principal ventaja de los implantes es que permiten realizar mordidas más fuertes, sin el problema que se produce con las dentaduras postizas y, que no es otro que el deslizamiento de la pieza. Estos deben ser colocados por dentistas profesionales que cuenten con la titulación exigida al efecto.

¿Por qué debemos utilizar dentadura postiza?

Una dentadura postiza proporciona casi la totalidad de los beneficios de un conjunto de dientes completo, facilitando al paciente la ayuda necesaria para restablecer una óptima capacidad de morder y de masticar los alimentos. Además, la misma permite que el paciente pueda hablar con más claridad. Otra cualidad que debemos tener en cuenta es que contar con una dentadura postiza mejorará la definición de la mandíbula y mostrará una sonrisa natural.

¿Cuándo están indicadas las dentaduras postizas?

• Cuando tengamos ausencia de todos o varios dientes y existan razones médicas que contraindiquen la colocación de implantes dentales.
• Cuando existiendo algunos dientes remanentes, no sean soporte suficiente o no queramos desgastarlos para hacer prótesis fija sobre los dientes restantes, si esto fuera posible.
• Por razones económicas, ya que es la solución más asequible, aunque con las incomodidades comentadas.
• A veces se utilizan, temporalmente, como solución provisional cuando se ha realizado una cirugía, previamente a la prótesis fija definitiva.

¿Cómo se coloca la dentadura postiza? ¿Tardaré en acostumbrarme?

El proceso de colocación de dentadura postiza por lo general se suele retrasar un poco, ya que se le deben extraer al paciente los dientes dañados o con caries. Posteriormente, hay que dejar pasar un tiempo determinado para la cicatrización de las heridas que se producen en las encías y el maxilar. Pasado el mismo, el dentista procederá a realizar un molde de los dientes con el objetivo de asegurarse de que la prótesis se ajuste perfectamente en la boca.

Acostumbrarse a la dentadura postiza en algunas ocasiones puede llevar su tiempo, y siempre dependiendo de las circunstancias personales de cada paciente. Al principio, todo paciente experimentará una nueva sensación en la boca que le parecerá extraña y, en ocasiones, algo incómoda. El proceso de masticar los alimentos, morder o incluso hablar resulta diferente. Pero no debes preocuparte, puesto que en unos cuantos días comenzarás a sentirla como una parte natural de tu boca.

Ventajas de las dentaduras postizas

• Su ventaja principal es la de restaurar las piezas dentarias perdidas para dar función y estética del paciente.
• En general, no requiere una intervención quirúrgica para su realización.
• Son fáciles de mantener. Para ello, hay que tener en cuenta la necesidad de realizar rellenos y limpiezas profesionales del aparato cada cierto tiempo.
• Es fácil de reparar en caso de una posible rotura.
• Además, en el caso de que se pierda un diente natural, es posible adaptarla, añadiéndole una nueva pieza dentaria al propio aparato.
Es una solución económica frente a las prótesis fijas, más costosas, sobre dientes o implantes dentales.

Desventajas de las dentaduras postizas

• Se mueve, a diferencia de una prótesis fija, y resulta más incómoda para el paciente. Por lo tanto, es muy común el uso de adhesivos para prótesis, los cuales son difíciles de limpiar, y acumulan más suciedad, provocando mal aliento y mal sabor.
• Debido al movimiento, pueden provocar, a veces, pequeñas heridas en la encía.
• El hueso que sostiene la dentadura, si no hay dientes o implantes en él, se va reduciendo con el tiempo, por lo que es necesario realizar rellenos periódicos de la prótesis removible para mantenerla correctamente a largo plazo.
• Al ser “de poner y quitar”, teniendo en cuenta que al día nos los retiraremos mínimo después de cada comida para limpiarla, es más fácil que se pueda caer y romper.
• Cabe la posibilidad, si no hay una correcta higiene y mantenimiento, debido a la humedad y calor de la boca y la saliva, que aparezcan hongos. Estos enrojecen la mucosa creando una sensación incómoda de picor y escozor.
• Es muy común tener alteraciones del sabor cuando se usa la prótesis por mucho tiempo.

¿Cómo es el cuidado de las dentaduras postizas?

Es recomendable cuidar su dentadura postiza de la misma forma que lo haría si fueran sus dientes naturales, ya que en ellas también se pueden formar placas y se pueden acumular bacterias, tanto en la superficie de prótesis como de las encías. Por ello, mantener la dentadura postiza y las encías lo más limpias posible puede ayudar a prevenir molestias, infecciones e incluso el mal aliento.

Para cuidar su dentadura postiza siga estos consejos:

• Lo ideal es que se coloque sobre una toalla doblada, una alfombra o incluso sobre un recipiente con agua cuando usted desee retirarse la dentadura postiza, de esa manera podrá evitar que se rompa si esta se cae.
• Dejarla en agua tibia o incluso hacer uso de líquidos limpiadores especiales para prótesis dentales durante la noche es una buena manera de mantenerla limpia. Evite a toda costa dejarla en agua caliente.
• Limpie todos los días su dentadura postiza, de esa manera podrá prevenir manchas e implica que su boca permanezca sana.
• Después de comer deberá sacarse la prótesis de la boca y tendrá que enjuagar la misma para eliminar cualquier resto de comida que se haya adherido a ella.
• Lo recomendable es usar un cepillo especial para limpiar dentaduras postizas o en su defecto, podrá utilizar un cepillo de dientes que tenga cerdas suaves.
• Para limpiarlas podrá usar un jabón para las manos o incluso un detergente suave que se use para lavar los platos, pero está totalmente prohibido usar limpiadores domésticos que sean abrasivos, y por supuesto, lejía.

Las recomendaciones para cuidarse la boca todos los días son:

• No usar la dentadura postiza mientras duerme, de esa manera las encías pueden descansar.
• En caso de que presente enrojecimiento o hinchazón en las encías, lo mejor que puede hacer es dejarlas de usar por un tiempo para que las encías sanen.

¿Qué otros detalles debo saber sobre las dentaduras postizas?

No deberá usar una dentadura postiza que sea excesivamente grande y que no se ajuste a su boca. Del mismo modo que tampoco debe usar una que genere chasquidos al comer o que genere incomodidades. En el caso de que la dentadura siga generando problemas una vez pasadas las primeras semanas, deberá acudir a su dentista para que estudie la posibilidad de hacer un ajuste de la misma.

Tal y como hemos mencionado anteriormente, la forma de sus encías e incluso la forma de sus huesos mandibulares puede cambiar con el paso del tiempo. Este es un proceso normal, pero puede producir desajustes en su dentadura postiza y como consecuencia directa de todo esto dejar de quedarle bien. En estos casos el problema se soluciona usando un adhesivo especial para dentaduras postizas que puede ayudar a mantenerlas en su lugar. Por eso es importante hacer ajustes regulares de la dentadura postiza.

El uso diario inevitablemente genera desgaste en las dentaduras postizas. Por lo que es habitual que tras 5 años tengas que cambiarla.

brackets para adultos en bilbao

Retenedor Lingual: Qué es y cuanto tiempo debe de durar

¿Qué pasa una vez acaba el tratamiento de ortodoncia? Al finalizar el tratamiento, los ortodoncistas no nos podemos olvidar por completo y pensar que los dientes se mantendrán en la misma posición. En este momento, entran en juego los retenedores linguales, los cuales culminan el proceso de alineación de los dientes.

Un retenedor dental es un elemento que se coloca al finalizar un tratamiento de ortodoncia convirtiéndose en una de las partes más importantes de éste.

Uno de los objetivos de cualquier ortodoncista es garantizar al paciente una estabilidad en su tratamiento dental, ya sea con ortodoncia invisible o con ortodoncia convencional.

¿Por qué es tan importante finalizar tu tratamiento con unos retenedores?

La estabilidad de tu tratamiento principalmente la da la oclusión final, pero los ortodoncistas luchamos contra un equilibrio de fuerzas entre tus músculos masticatorios, huesos auxiliares y equilibrio de fuerzas dentales, unos elementos que pueden variar con el paso del tiempo. A este hecho se le añade que, las fibras del ligamento periodontal, el amortiguador de tus dientes, al recibir un tratamiento de ortodoncia, adquieren cierta elasticidad, una elasticidad que puede provocar movimientos indeseados. No olvidemos que los dientes siempre van a tender a volver a sus posiciones originales. Por estos motivos es de vital importancia fijar los dientes colocando los retenedores al finalizar tu tratamiento, así evitaremos además retratamientos futuros.

¿Qué son los retenedores linguales?

Los retenedores son unas barras linguales “ancladas” a los caninos que, colocados de manera correcta, mantienen los dientes en su sitio y en su posición correcta tras retirar los brackets u ortodoncia invisible, y los arcos. Estas barras o alambres, van pegados a los dientes con composite, el mismo material usado para pegar los brackets o los ataches de la ortodoncia invisible.

De ese modo, la retención consigue mantener los dientes que están recién movidos por el tratamiento de brackets y consiguen darles estabilidad en su nueva posición, evitando así la recidiva.

¿Cuánto tiempo debe durar el tratamiento?

Tal y como hemos apuntado, la tendencia natural de los dientes es volver a su posición inicial anterior al tratamiento. Este hecho sucede en mayor medida durante los primeros años tras retirar la ortodoncia. Por ese motivo, es fundamental que se implante este tipo de tratamiento con la mayor brevedad posible para asegurar que no habrá un movimiento dental y las piezas mantendrán su posición.

El período de tiempo que tienen que llevarse los retenedores varía de unos individuos a otros, ya que cada dentadura presenta unas características concretas. Aun así, se puede generalizar el tiempo aproximado que debe durar:

Los adultos deben llevar la retención fija de modo indefinido desde que acaba el tratamiento de ortodoncia.
Los niños y adolescentes deben llevar la retención fija hasta que finaliza la fase de crecimiento y empiezan a crecer las muelas del juicio.
Este espacio de tiempo puede parecer muy largo, pero el uso de la retención lingual es muy discreto y cómodo. De esta manera, es fácil olvidarse de él aunque estará realizando un trabajo constante.

¿Qué tipos de retenedores linguales existen?

Normalmente, se colocan 2 tipos de retenedores. Retenedores fijos linguales colocados en la arcada superior y en la arcada inferior y retenedores removibles de uso nocturno en forma de plástico transparente.

El retenedor fijo lingual es una fina lámina o hilo de acero trenzado que se cementa en la cara interna de los dientes de colmillo a colmillo. Son extremadamente estéticos, cómodos y al ir colocados en la cara interna del diente, nadie se dará cuenta que los llevas. No interfieren en la pronunciación y no generan llagas ni molestias.

Por otro lado, los retenedores removibles son unas férulas transparentes hechas a medida para tu boca, muy parecidas a los alineadores utilizados en la ortodoncia invisible.

Retenedores linguales Fijos

Su principal función es mantener la posición adquirida por el tratamiento de brackets. Así, mantienen la posición de los incisivos y tratan el mantenimiento de los diastemas (espacios entre dientes) y de los espacios que se han cerrado después de una extracción.

Dentro de los retenedores fijos, podemos diferenciar entre dos categorías:

• Linguales. Se trata de unas barras linguales colocadas de canino a canino y pegadas con composite. Este tipo presenta un alambre rectangular trenzado.
• Linguales estéticos. Tienen el mismo funcionamiento y objetivo que los anteriores, pero con la diferencia de que estos están hechos de fibra de vidrio.

Retenedores linguales Removibles

Este tipo de retenedores están hechos de poliuretano estético y transparente. Se colocan como doble retención y han de utilizarse solo durante la noche.
Son unas férulas transparentes hechas a medida para tu boca, muy parecidas a los alineadores utilizados en la ortodoncia invisible.

¿Un tratamiento ortopédico en niños necesita retenedores?

Los tratamientos en edades tempranas, básicamente se enfocan a favorecer un correcto desarrollo de las bases óseas así como establecer unas correctas funciones masticatorias del niño. Sin embargo, en este tipo de tratamientos no siempre se mueven dientes, la gran mayoría de veces se tratan problemas ortopédicos. Estos tratamientos no suelen necesitar ningún tipo de retención.

¿Qué cuidados necesitan mis retenedores?

Para los retenedores linguales fijos es importante realizar un correcto cuidado de los aparatos que coloquemos. Como siempre, la higiene adquiere un papel fundamental, no sólo en el mantenimiento de los retenedores sino en el mantenimiento de tu salud bucodental.

Los Essix, o retenedores removibles de “quita y pon”, como ya hemos comentado anteriormente, normalmente se utilizan sólo para dormir. Al estar expuestos a la saliva y a sus componente minerales, es necesario limpiarlos con agua y jabón de PH neutro. Nunca deben lavarse con pasta de dientes, ya que esta puede deteriorar el material del que están fabricados y eliminar sus propiedades estéticas.

Para evitar malos olores es muy importante secarlos bien con un papel absorbente, de este modo también evitarás cambios de coloración indeseados.

Conclusiones:

Un tratamiento de ortodoncia convencional o invisible, no sólo está formado por una fase activa donde movemos los dientes, sino que también forma parte la fase de retención siendo esta última una de las fases más importantes de todo el tratamiento.

La colocación de los retenedores dentales tiene como único objetivo garantizar la estabilidad de los resultados obtenidos y juegan un papel fundamental en el éxito nuestro tratamiento a largo plazo.

En caso de no colocarlos correctamente, existe un elevado riesgo de que las piezas dentales puedan volver a su posición original debido a diversos factores como la elasticidad del ligamento de los dientes o la potencia muscular de los músculos masticatorios que utilizamos al comer.

¿Te han salido llagas en la boca?. Te contamos cómo curarlas.

Probablemente hayas experimentado en más de una ocasión la molestia de tener llagas en la boca. También llamadas aftas o úlceras bucales, se presentan en la zona interna de las mejillas, lengua, labios, encías o incluso en el paladar. A pesar de que suelen ser pequeñas, resultan muy incómodas para la persona que las padece, ya que generan dolor y molestias. Además, causan dificultades para comer y hablar.

¿Qué son las aftas?

Las llagas son heridas que pueden aparecer en cualquier parte de la cavidad oral. Son muy fáciles de identificar, no solo por la aflicción que acarrean sino por ser de color blanco o amarillento. Aunque pueden tener cierta similitud con el herpes labial, no hay que confundir ambas afecciones. Al contrario de lo que sucede con el virus del herpes, las aftas no son contagiosas.

¿Por qué aparecen llagas en la boca?

El origen de las aftas se encuentra, como norma general, en una lesión bucal, pero también en problemas de salud diversos. Aun así, hay personas que tienen mayor predisposición que otras a tener llaguitas en la boca, al igual que ocurre con los herpes. Debido a que las causas por las que aparecen las aftas bucales son muy diversas, pueden presentarse tanto en bebés y adultos. Igualmente, no es extraño ver aftas bucales en niños de diferentes edades. Los motivos más habituales por los que se producen son los siguientes:

Lesión con un elemento punzante o metálico

De entre todas las causas, esta es una de las más frecuentes. Las úlceras debidas a una lesión bucal se producen especialmente en personas que llevan ortodoncia con brackets o prótesis dentales (fijas o removibles). Estos aparatos llevan arcos o ganchos que, si se sueltan, pueden sobresalir y clavarse en alguna parte de la boca. Sobre todo en el caso de personas con brackets – ya sean metálicos, linguales o de zafiro -, es muy ventajoso el uso de cera dental.

Del mismo modo, las aftas también pueden salir cuando nos mordemos accidentalmente la lengua o la mejilla al comer. Es conveniente evitar el hábito de morder continuamente ciertos objetos, como los bolígrafos, pues el roce que provoca también origina estas úlceras bucales. Y es que, ya hablemos de tener llagas en la lengua o en el labio, lo cierto es que son heridas muy dolorosas.

Bajada de defensas

Una bajada en nuestras defensas puede dar lugar a la aparición de diversas enfermedades como el herpes, un virus o cualquier proceso infeccioso (gripe, amigdalitis…). Sin embargo, cuando las aftas bucales aparecen como consecuencia de este tipo de enfermedades, es conveniente tener en cuenta una serie de consideraciones. Por ejemplo, la amigdalitis se caracteriza por producir fiebre y dolor de garganta, pero además puede dar lugar a una o varias llagas.

Sin embargo, es importante saber que la úlcera bucal en sí misma no causa fiebre ni dolor de garganta, sino que estos síntomas se deben a la propia amigdalitis. Por otro lado, las llagas en la boca también pueden aparecer en periodos de cambios hormonales (como durante la menstruación en mujeres) o cuando tenemos estrés o falta de sueño.

Sistema inmunológico debilitado

Un sistema inmunológico débil también puede originar llagas o aftas bucales, además de otro tipo de problemas de distinta índole y naturaleza. En este caso, debemos distinguir entre dos casos diferentes en cuanto a la inmunodepresión

– Situación temporal

– Crónica, como ocurre en personas que han tenido un trasplante.

Enfermedades autoinmunes

Las patologías autoinmunes están generadas por el propio sistema inmunitario del organismo, que debido a una anomalía ataca a las células sanas. Ejemplos de ellas son el pénfigo o el lupus, que además de causar diversos problemas a quienes las padecen, pueden originar llagas o úlceras en la boca.

Déficit extremo de vitaminas B y C

La alimentación repercute directamente sobre el estado de salud general y el bucodental en particular. Las consecuencias que una dieta deficitaria -donde no se incluyen alimentos saludables y equilibrados- tiene en nuestro cuerpo pueden llegar a ser muy graves: diabetes, obesidad, anemia, hipertensión… Pero además, la falta de nutrientes y en especial un estado carencial extremo de vitaminas B y C puede conducir a la aparición de úlceras en la boca.

Como norma general, una persona que mantenga una dieta relativamente sana no debe llegar a esta circunstancia. Aún así, nuestra recomendación es que consumas alimentos ricos en vitaminas y minerales, por los beneficios que conllevan para tu salud bucal y general.

Llagas bucales y maternidad

Tanto las mujeres embarazadas como los bebés recién nacidos son susceptibles de padecer molestas aftas bucales.

Llagas en la boca durante el embarazo

Los cambios hormonales propios del embarazo tienen una importancia decisiva en la aparición de llegas.

Durante la gestación, aumentan los estrógenos y la progesterona. Ambas hormonas generan un aumento no solo del flujo sanguíneo, sino también de la segregación de placa bacteriana. Y es precisamente este descontrol de las bacterias en la boca provoca asimismo una mayor incidencia de la gingivitis, la periodontitis y la aparición de aftas bucales.

Y no solo eso: la sequedad bucal, junto con una bajada de defensas en el sistema inmunológico, convierten a las embarazadas en un grupo de alto riesgo a la hora de padecen molestas aftas bucales. Unas molestias que, en general, suelen desaparecer tras el parto.

¿Cómo curar las aftas en la boca?

Antes de nada, es importante destacar que las llagas en la boca no requieren de tratamiento. Cuando se tienen, simplemente es necesario tener un poco de paciencia, ya que desaparecen por sí solas con el paso de los días. Por tanto, la curación del afta es un proceso espontáneo que pasa por la regeneración del tejido de la zona afectada.

Sin embargo, sí es cierto que existen productos específicos que pueden comprarse en farmacias y hacen más llevadero el proceso de curación. Dichos fármacos sirven para aliviar las molestias causadas por la herida y acelerar el proceso de cicatrización. Es frecuente que se comercialicen en forma de cremas o pomadas que contienen componentes como el ácido hialurónico.

Estos medicamentos para las llagas pueden ser una solución efectiva para reducir las molestias y el dolor. Su función es crear una pequeña película protectora que aísla la zona afectada ante posibles roces y contactos.

¿Cuánto duran las llagas en la boca?

De manera natural, es decir, sin la utilización de un producto específico que proteja la zona afectada, las llagas tardan en curarse entre tres y cinco días. Sin embargo, este proceso puede alargarse hasta una semana.

En cambio, si usamos los productos mencionados que se adquieren en farmacias, es posible que el proceso de curación se acorte hasta los dos o tres días. El proceso de cicatrización de las llagas suele ser más lento que otras heridas. Esto se debe a que se producen en la boca, es decir, una zona húmeda que dificulta este proceso de curación.

Precisamente por la complejidad que otorga el tejido afectado, es conveniente que sigas algunas recomendaciones:

Consumir alimentos blandos mientras tengas la llaga.

En la medida de lo posible, no ingerir comidas ácidas o picantes.

Tener cuidado de no pasar la lengua.

Evitar el contacto de los dientes en la zona del afta.

¿Dónde pueden salir las aftas bucales?

Estas pequeñas úlceras pueden aparecer en diferentes sitios dentro de la cavidad oral. A continuación, enumeramos cada uno de ellos y te contamos por qué suelen aflorar en dichas zonas.

Llagas en la lengua

Las llagas en la lengua son pequeñas heridas que aparecen en la superficie lingual. Éstas son realmente molestas a la hora de hacer cualquier actividad habitual de nuestro día a día como hablar, comer o beber.

Son muy incómodas porque la lengua es necesaria para realizar todas las funciones de la boca, y los roces continuos de ésta con los dientes o con el paladar pueden provocar que el estado de la afta empeore.

Hay que tener en cuenta que, a las causas habituales de las llagas, se une en el caso de la lengua otra muy frecuente: las mordeduras, que también producen llagas muy dolorosas.

Aftas en la encía

Las úlceras en el tejido gingival son también bastante habituales. En este caso, su color suele ser de tonalidades rojizas. En algunas ocasiones, presentan algunas manchas blanquecinas o amarillentas a su alrededor.

Y el problema, aunque sean algo más llevaderas que las de la lengua, es que pueden sangrar e incluso infectarse.

Las llagas en las encías pueden aparecer por las razones que hemos nombrado con anterioridad cuando citábamos los distintos factores de riesgo. Pero, además, hay otro origen bastante común de las llagas en las encías: los golpes y traumatismos que producen infecciones. Éstas afloran en forma de llagas en las encías.

Además, las llagas en las encías también son típicas de pacientes de ortodoncia que han elegido un método fijo. Y es que los arcos de los brackets, tanto metálicos como de zafiro, producen cortes y heridas que pueden terminar derivando en aftas bucales.

Llagas en los labios

La variante más habitual de las llagas en los labios es la que se origina en un herpes. Los herpes labiales son causados por un virus muy contagioso denominado herpes simplex (HSV). Uno de sus principales síntomas son las llagas y ampollas en los labios.

Este tipo de lesiones de origen vírico pueden ir acompañadas de las molestias propias de un resfriado o catarro.

El problema del herpes labial es que no se cura del todo. Este virus permanece latente, y puede reaparecer en cualquier momento. Esta situación es especialmente común cuando el paciente experimenta un nuevo episodio de bajada de defensas, altos niveles de estrés, estados febriles e incluso tras una prolongada exposición al sol.

Las mujeres, con los cambios hormonales que se producen durante la menstruación, también podemos sufrir llagas en los labios por culpa del virus herpes.

Aftas en el paladar

Las llagas en el paladar suelen surgir en la mucosa con la apariencia de una herida abierta de color blanco o amarillo. Estas aftas producen un dolor constante, que se ve agravado al tragar o al pasar la lengua sobre la ampolla.

Cuando aparecen en la parte más dura del paladar suelen originarse por la ingesta de alimentos o bebidas muy calientes, que producen una quemadura en el tejido. En esos casos, el dolor es continuo mientras se cura la quemadura.

Los mordiscos o los traumatismos también causan llagas en el paladar. Tanto si es por un pinchazo como por un mordisco, la llaga puede sangrar y existe cierto riesgo de que llegue a infectarse.

¿Cuándo debo contactar con un profesional?

Aunque, como mencionábamos anteriormente, lo más habitual es que las llagas desaparezcan por sí solas en unos días, existen ciertos casos en los que es necesario contactar con un profesional:

• Si las aftas son más grandes de lo habitual.
• Si se presentan de forma recurrente, una vez que las anteriores ya se han curado o si se tienen brotes frecuentes.
• Si no desaparecen al cabo de 2 semanas o más tiempo.
• Si la aparición de llagas viene acompañada de otros síntomas como fiebre, dolor de cabeza o una erupción cutánea.

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Microtornillos en ortodoncia

La ortodoncia engloba cualquier movimiento dentario orientado a mejorar la alineación de los dientes y la oclusión de una persona.

Los dentistas se sirven en ocasiones de herramientas que permiten agilizar este proceso y que son esenciales para lograr el resultado deseado.

Algunos de estos elementos auxiliares son las gomas de ortodoncia o los ataches en el caso de los alineadores transparentes, como Invisalign, pero también existen los microtornillos.

Los microtornillos o minitornillos o microimplantes, son un dispositivo auxiliar utilizado en el tratamiento de la ortodoncia para conseguir un anclaje más sólido y sin efectos adversos sobre los dientes de apoyo, permitiendo así hacer movimientos más complejos con apoyo óseo y cambios dentarios y del hueso alveolar que los rodea; o mover dientes de forma segmentaria o aislada, sin necesidad de colocar muchos aparatos o mover todos los dientes.

Los microtornillos se colocan en el hueso que rodea a los dientes, o en estructuras externas a los dientes de la Mandíbula o Maxilar Superior y se utilizan para ejercer fuerzas directamente, sujetar los alambres ortodóncicos o anclar y fijar uno o varios dientes, lo que ayuda a mover los dientes de manera controlada y predecible.

No olvidemos, que, si uno intenta realizar movimientos de dientes, apoyando en otros dientes, todos ellos queramos o no van a recibir las fuerzas y por tanto van a experimentar cambios, algunos de los cuales pueden no ser deseables o incluso perjudiciales

Estos tornillos son muy pequeños, ninguno supera los 2 mm de diámetro y unos pocos más de longitud. Su colocación es sencilla, rápida e indolora (con apenas unas gotitas de anestesia en la zona más superficial de la encía) y sin apenas complicaciones en el transcurso de su uso. Una vez se colocan entre los dientes o en otras partes del hueso, son poco visibles, no se nota que los llevas y la cabeza que emerge está muy bien diseñada para que las molestias sean mínimas o nulas.

Los microtornillos son una opción popular para los pacientes que buscan un tratamiento de ortodoncia discreto y efectivo y también una alternativa para movimientos que antes eran imposibles o arriesgados.

¿Cómo se colocan los microtornillos de ortodoncia?

Es una intervención muy sencilla y poco invasiva. Lo realmente importante es su planificación.

En primer lugar, el ortodoncista tendrá en cuenta cada caso de forma personalizada para decidir cuál es el lugar más idóneo para colocar el microimplante. Las zonas más frecuentes suelen ser: tras la última muela, en el paladar o entre las raíces dentales. Generalmente se colocan en lugares poco visibles, en caso de ser en la parte exterior de la encía se intentarán ubicar sobre la arcada de la sonrisa.

En referencia al proceso de la intervención, el dentista aplica una mínima anestesia local y coloca el microimplante en su posición en pocos minutos. No es necesario dar puntos de sutura en el tejido mucoso. Puesto que el mismo microtornillo ya está creado para autoperforar y autorroscarse, esto significa que no hay que hacer ninguna incisión ni agujero previo a la colocación. El mismo día de la intervención ya se puede colocar una goma elástica o cadeneta y unirse al aparato ortodóncico. Al finalizar, el paciente no siente ningún dolor y puede hacer vida normal. En su lugar, simplemente notará un botón que sobresale de su encía.

El microimplante permanecerá en esa posición durante unos meses hasta lograr la posición dental deseada. Es importante que sepas que el tiempo varía según cada tratamiento.

Una vez terminado el tratamiento de ortodoncia, los microtornillos serán retirados. Los microimplantes se retirarán muy fácilmente, ya que no se produce una ósteo-integración completa. Tan solo habrá que hacer girar el tornillo en la dirección inversa a su colocación y en cinco segundos ya está fuera. Cabe decir que en muchas ocasiones no es ni necesaria la anestesia.

La utilización de TAC y software de planificación en 3D son prometedores, pero la planificación en 2D con radiografías y el juicio clínico y experiencia del profesional son la opción más económica y común con excelentes resultados.

Ventajas de los microimplantes o minitornillos en ortodoncia:

Ampliación de las posibilidades en el tratamiento ortodóncico: los microimplantes permiten tratar casos complejos de ortodoncia con más eficacia y precisión, expandiendo los límites de lo que se podía hacer anteriormente y permitiendo tratar un mayor número de casos límite con medios sólo ortodóncicos si el paciente rehúsa una Cirugía Mayor.

Fácil colocación: la colocación de los microimplantes es muy sencilla, con una intervención mínima y sin dolor para el paciente, con sólo una anestesia mínima en la encía superficial y apenas unos minutos en su inserción. No obstante, su colocación deberá ser llevada a cabo con alguien experto en estas técnicas y sus aplicaciones ortodóncicas.

Fácil retirada: una vez terminado el tratamiento, la retirada de los microimplantes es igual de sencilla incluso sin necesidad de anestesia, sin cicatrices y curación en apenas uno o dos días.

Alto índice de éxito: los microimplantes han demostrado ser una opción muy efectiva y con un alto índice de éxito en el tratamiento ortodóncico. Aunque existen algunos índices de fracaso pequeños (en torno al 10%) estos fracasos no suponen mayor problema que la caída y retirada del minitornillo y su nueva colocación si fuera necesario.

Diseño adaptado: el tamaño pequeño y el diseño adaptado a las condiciones de la boca del paciente hacen que los microimplantes sean cómodos y prácticamente imperceptibles. Cada vez son mejores y están mejor diseñados los sistemas con este fin.

Bajo coste: los microimplantes son una opción económica en comparación con otros tratamientos ortodóncicos que, aunque incrementan ligeramente el presupuesto de Ortodoncia por el coste en sí de los dispositivos y su colocación, es mínimo en comparación con cualquier otro procedimiento como Miniplacas, Cirugías Mayores etc.

Rápida cicatrización: después de la retirada de los microimplantes, la cicatrización es de apenas uno o dos días y la encía y el hueso vuelven a estar como si nada.

Desventajas de los microimplantes en ortodoncia:

Un 15-20% de los microimplantes pueden moverse o desprenderse durante el tratamiento y pueden requerir ser reubicados. Sin embargo, su reubicación es igual de sencilla e inocua que la primera colocación.

Pueden presentar complicaciones después de su colocación, como la inflamación y reacción de la mucosa circundante al microimplante, que pueden causar hinchazón, enterramiento o encallecimiento. Esto puede evitarse manteniendo una higiene exhaustiva y aplicando geles antisépticos, así como planificando correctamente su ubicación en una encía no móvil. Afortunadamente las complicaciones no van a más y tienen fácil solución.

Al igual que los brackets, los microimplantes pueden causar molestias o rozaduras los primeros días hasta que la mucosa se acostumbre al roce. Esto puede minimizarse aplicando resinas de goma o composite sobre la cabeza del microimplante o cera de ortodoncia.
El uso indiscriminado de los microimplantes como una moda, gracias a vendedores que promueven esta técnica, puede llevar a su uso innecesario en ocasiones. Es importante utilizarlos sólo cuando supongan una ventaja adicional para el paciente y no sólo porque se haya vendido como la mejor o más novedosa opción.

Es importante destacar que, a pesar de las desventajas, los microimplantes en ortodoncia siguen siendo una alternativa muy útil y eficaz para el tratamiento ortodóncico en casos adecuados.

Microtornillos en Ortodoncia en combinación con Invisalign

Los Alineadores Invisibles y los microtornillos: una combinación ganadora

Los Alineadores Invisibles son una excelente opción en Ortodoncia para corregir los problemas de posición de los dientes a través de mecánicas de empuje. Sin embargo, estos alineadores tienen dificultades al tratar de realizar movimientos que requieren fuerzas de tracción.

Es aquí donde entran en juego los microtornillos, los cuales están diseñados específicamente para aplicar fuerzas de tracción en los dientes. La combinación de ambas técnicas brinda grandes posibilidades en el tratamiento ortodóncico.

Además, los microtornillos son una solución ideal para solucionar las limitaciones o inconvenientes pequeños de los Alineadores Invisibles. Con esta combinación, podemos decir que hoy en día es posible tratar casi todo de la misma manera con Alineadores Invisibles que con brackets tradicionales, sólo es necesario saber cómo aplicar los microtornillos en conjunto con los Alineadores.

Sin embargo, es importante destacar que el microtornillo por sí solo no resolverá ningún problema, sino la mecánica y el sistema de fuerzas aplicado a los dientes. Por lo tanto, es fundamental conocer bien cómo se aplican estas fuerzas para aprovechar al máximo la combinación de Invisalign y microtornillos.

La unión de Invisalign con microtornillos es una de las herramientas más efectivas que tenemos en Ortodoncia para los casos complejos, tanto en efectividad como en comodidad y simplicidad para el paciente. Gracias a estos dos avances, el paciente adulto con situaciones o maloclusiones complejas puede beneficiarse del mismo tipo de tratamiento cómodo, simple y sin grandes complicaciones.

Cuidados después del implante de un microtornillo

Después de la colocación de microtornillos en Ortodoncia, es fundamental seguir unos cuidados adecuados para asegurar su estabilidad y éxito, así como prevenir complicaciones. Aquí hay algunos consejos clave para seguir después del implante:

• Cepillar suavemente: Cepille suavemente la cabeza del tornillo con un cepillo suave o de cirugía.

• Aplicar Clorhexidina en gel: Aplique Clorhexidina en gel alrededor de la cabeza del tornillo todas las noches para evitar el acúmulo de bacterias.

• Usar cera para proteger: Si es necesario, puede aplicar cera para proteger los dientes de los roces durante la primera semana.

• Mantener el tornillo en su lugar: Si el tornillo se afloja o se mueve, es posible que sea necesario ajustarlo para mantenerlo en su lugar. Vigilar su visibilidad, que no se entierre, movilizar los tejidos alrededor para que no se enclave o lo engloben cerrándolo y si hay cambios avisar a la clínica.

• Proteger el tornillo si se cae: Si el tornillo se cae, guárdelo y llévelo a su ortodoncista, ya que generalmente se puede volver a colocar sin problemas.

• Los cuidados postoperatorios son esenciales para el éxito del tratamiento de Ortodoncia con microtornillos. Siguiendo estos consejos y trabajando en estrecha colaboración con su ortodoncista, puede asegurarse de lograr los mejores resultados posibles.

Fractura mandibular

La mandíbula juega un papel muy importante al respirar, comer y hablar. Por desgracia, cualquier tipo de dolor mandibular puede impedir estas funciones tan indispensables. El dolor crónico de la mandíbula puede ser causado por varias condiciones: apretar los dientes (bruxismo), trastornos de la articulación témporomandibular (ATM), la enfermedad periodontal e incluso ciertos problemas sinusales. También puede ser el resultado de una fractura de mandíbula de la que podría no haberse percatado.

Definimos la fractura de mandíbula como la alteración estructural del hueso mandibular tras un traumatismo facial de diversa etiología.
Prácticamente todas estas fracturas son el resultado de algún tipo de traumatismo que, en términos quirúrgicos, puede definirse como “una fuerza física causante de lesión”.

Estas fracturas son clínicamente importantes por varios motivos:

• Los tejidos blandos y los huesos de la cara confieren la protección anterior al cráneo.
• El aspecto facial es un factor importante del “aspecto personal”
• Su conjunto anatómico se asocia a varias funciones importantes para la vida diaria, tales como la alimentación y el habla. Cuando estas funciones se ven disminuidas puede acarrear consecuencias potencialmente graves sobre el estilo y la vida del paciente.

Causas de las fracturas de mandíbula

La mandíbula se encarga de la mayor parte de la mecánica de la boca, abriéndola y cerrándola y permitiéndonos masticar alimentos.

Cuando un hueso se fisura o se rompe, ocurre lo que se conoce como fractura. De acuerdo con Harvard Health Publications, la fractura de mandíbula es el tercer tipo de fractura facial más frecuente después de las de la nariz y de los pómulos. Existen varios tipos de traumatismos físicos que pueden causar una fractura de mandíbula: los accidentes automovilísticos donde el pasajero se golpea contra el tablero, los accidentes industriales, los golpes al practicar deportes de contacto como el fútbol o el hockey o cualquier caída o tropiezo que no se frene con las manos.

Si cree que podría haberse fracturado la mandíbula por alguna de estas circunstancias, no deje de acudir al médico cuanto antes.

Las fracturas y las luxaciones

Las luxaciones mandibulares pueden ser igual de graves que las fracturas, pero la diferencia no siempre es fácil de reconocer. De acuerdo con los Harvard Health Publications (National Institutes of Health, NIH), las luxaciones se presentan cuando la mandíbula se sale de su posición normal en una o ambas articulaciones témporomandibulares (ATM), que son los lugares donde esta se conecta con el cráneo.

Es importante poder reconocer los síntomas de cada uno de los casos. Las señales de una fractura de mandíbula incluyen:

• Moretones en la cara, inflamación y adormecimiento.
• Rigidez en la mandíbula, dolor al tacto o dolor que empeora al morder y al masticar.
• Sangrado en la boca.
• Dientes dañados o flojos.

Las señales de una luxación mandibular incluyen:

• Dificultad para hablar.
• No poder cerrar la boca.
• Una mordida mal alineada o salida.

Las dos condiciones provocan dolor y restringen la movilidad de la mandíbula. Después de realizar un examen físico, el médico le tomará una radiografía para confirmar el diagnóstico.

¿Cómo se trata una fractura de mandíbula?

• Los analgésicos pueden ser formulados o recomendados por su médico.

• Los antibióticos puede ser formulado si usted tiene una herida abierta. Se usan los antibióticos para la prevención o tratamiento de una infección causada por una bacteria.

• Una fijación con alambres de la mandíbula es posible que se use para mantener la mandíbula en su lugar y evitar que se mueva. Esto ayudará a que los huesos se curen de la manera adecuada.

• La cirugía puede ser necesaria para colocar el hueso de la mandíbula a su posición normal si la fractura es grave. Para sostener unidas las partes de la mandíbula, pueden usar pines, placas y tornillos. La cirugía también puede necesitarse para corregir una deformación o para reparar tejidos dañados como la boca, lengua, nervios o vasos sanguíneos.

¿Qué puedo hacer para manejar una fractura de mandíbula?

• Aplique hielo. El hielo ayuda a disminuir la inflamación y el dolor. El hielo también puede contribuir a evitar el daño de los tejidos. Use una compresa de hielo o ponga hielo triturado en una bolsa de plástico. Cúbrala con una toalla antes de colocarla sobre su cara. Aplique hielo por 15 a 20 minutos por hora o según indicaciones.

• Consuma alimentos blandos según las indicaciones. Si tiene alambres en la mandíbula, tendrá que comer alimentos licuados con líquidos. Tendrá que ingerir estos alimentos con una jeringa o una cañita o popote. Si no tiene alambres de fijación, es posible que sólo pueda comer alimentos blandos. Algunos de estos alimentos son el puré de manzana, plátanos, cereal cocido, requesón, gelatina, pudín y yogur. Pida más información a su médico acerca del tipo de alimentos que puede comer.

• Limpiar la boca de 4 a 6 veces al día. Los médicos le mostrarán cómo hacerlo. Al limpiarse la boca eliminará los restos de comida y se limpiará los dientes. Un cepillo de dientes suave tamaño infantil le ayudará a llegar más fácilmente a todas las partes de los dientes. Un irrigador ayudará a eliminar restos de comida y partículas entre los dientes. Aplicar vaselina a los labios para evitar convertirse en fisurados.

• Mientras que la mandíbula se cura, no practicar deportes. La mandíbula fracturada puede sangrar, se pueden formar moretones con facilidad o fracturarse otra vez. Pregúntele a su médico cuándo es seguro practicar deportes nuevamente.

• No ponga presión en su mandíbula. No empuje ni permita que nada empuje su mandíbula. Duerma boca arriba.

¿Cuándo debo buscar atención inmediata?

• Usted tiene dificultad para respirar.
• Si de repente siente un desvanecimiento y falta de aire.
• Si le duele el pecho cuando respira hondo o tose. En caso de que expectore sangre.
• Su brazo o pierna se siente caliente, sensible y adolorida. Se podría ver inflamado y rojo.
• ¿Cuándo debo comunicarme con mi médico?
• Tiene fiebre.
• Usted tiene un fuerte dolor de cabeza.
• Usted tiene su rostro entumecido.
• Le duele la mandíbula y el medicamento no le calma el dolor.
• Se le sueltan los alambres de la boca.
• Usted tiene preguntas o inquietudes acerca de su condición o cuidado.